Después de llevar media vida
pagando los salarios de mi casa,
me tratan como si fuera un perro,
me echan sin decir media palabra.
A ver cómo le cuento yo a mis hijas
que guarden sus muñecas en una caja,
y que esta noche duermen con su abuela,
a ver cómo les explico esta jugada.
Vengo pedirle señor juez que no lo haga
porque la ayuda me han quitado,
y no tengo nada.
Que ya no sé qué voy a ser,
que ya no sé qué voy a ser...
Quíteme la luz del sol o quíteme la vida,
también la ilusión, llévese mis sueños,
y déjeme sin nada.
Quíteme la religión, quíteme la conciencia
con esta canción, llévese mis recuerdos,
y déjeme sin alma.
Quíteme la luz del sol o quíteme la vida,
también la ilusión, llévese mis sueños,
y déjeme sin nada.
Quíteme la religión, quíteme la conciencia
con esta canción, llévese mis recuerdos,
y déjeme sin alma.
Ahora mi casa es como un trinchera,
me veo con mis manos encadenadas,
consciente de que aquí no hay quien se mueva,
aún no he perdido la esperanza.
La vida se complica y no comprendo
como he llegado a esta encrucijada
de leyes que dictaron estos necios,
los necios que pueden pagar su casa.
Vengo pedirle señor juez que no lo haga
porque la ayuda me han quitado,
y no tengo nada.
Que ya no sé qué voy a ser,
que ya no sé qué voy a ser...
Quíteme la luz del sol o quíteme la vida,
también la ilusión, llévese mis sueños,
y déjeme sin nada.
Quíteme la religión, quíteme la conciencia
con esta canción, llévese mis recuerdos,
y déjeme sin alma.
Pero no me dejes en la calle,
no destruyas mi garganta
que aquí yo no soy el culpable,
no he perdido la esperanza.
Quíteme la luz del sol o quíteme la vida,
también la ilusión, llévese mis sueños,
y déjeme sin nada.
Quíteme la religión, quíteme la conciencia
con esta canción, llévese mis recuerdos,
y déjeme sin alma.